Desde finales de mayo a julio puede verse florecer este raro ajo amarillo. Durante casi cien años esta pequeña planta bulbosa se consideró extinta. Fue localizada e identificada por primera vez en la historia por los botánicos franceses Marie Clément Gaston Gautier y George Rouy, el 23 de junio de 1896, en la sierra de Estepona, y descrita para la ciencia por el primero de ellos como Allium rouyi, en honor a George Rouy, quien la incluye en su obra de 1898 Ilustrationes Plantarum Europae rariorum. Rouy escribe sobre la excelencia de la especie, con un tallo de hasta 30(50) cm de altura, reconocible a primera vista por sus flores amarillas, con un característico nervio verdoso en sus tépalos.

Desde ese primer momento, a finales del siglo XIX, no había vuelto a ser recolectada a pesar de las numerosas campañas realizadas en su búsqueda por distintos investigadores, por lo que estaba considerada extinta en diversos listados nacionales e internacionales. Los ejemplares recogidos por Gautier y Rouy en 1896, conservados en el herbario de Rouy en Lyon (Francia), eran las únicas muestras existentes de esta planta hasta que, durante los meses de mayo y junio de 1992, un nuevo intento de búsqueda sistemática basada en la distribución de otras especies de Allium en el sector Bermejense dio como resultado la localización de un área muy reducida de la especie formado por unos 50 individuos. Desde ese año 1992 la especie figura inscrita en el Atlas y Libro Rojo de la Flora Vascular Amenazada de España como especie en peligro crítico (CR), y en el Lista Roja de la flora vascular de Andalucía como especie en peligro de extinción (CR), siendo sus principales amenazas el pastoreo, el coleccionismo, los incendios y los tratamientos forestales inadecuados.

En la actualidad A.rouyi es considerada la misma especie que A. chrysonemum, aunque no hay unanimidad al respecto. Algunos autores definen A.rouyi como taxón endémico bermejense si bien en la descripción de Cabezudo et al de 1992 cuando, como se ha mencionado, se redescubrió la especie en la ubicación original (Sierra Bermeja), se destacaba la semejanza de la micromorfología de las semillas de ambas especies. En cualquier caso Allium rouyi es considerada una planta endémica del sur de España (Provincia Bética, Sector Subbético), con escasísimas poblaciones, dentro del sector Bermejense, en Sierra Bermeja (Sierra Palmitera, Sierra Real) y Sierra Alpujata; los ejemplares bermejenses son aparentemente menos robustos que los del resto de ubicaciones fuera de este ámbito, sean o no la misma especie.